MIAMI - Wilson Palacios de Honduras está en duda para el partido del viernes contra Granada, dijo el técnico Luis Fernando Suárez.
"Yo no soy médico, pero el informe que he recibido dice que no está en forma óptima como para jugar", dijo Suárez a través de un traductor después del entrenamiento tarde la noche del miércoles. "No queremos arriesgarlo, y preferimos que se concentre en su futuro profesional y no hacerlo jugar demasiado pronto."
El mediocampista del Tottenham Hotspur se sometió a una cirugía artroscópica de la rodilla el 12 de marzo después de haber quedado lesionado en un entrenamiento, y se espera que pierda hasta tres semanas.
Palacios entrenó por separado con los fisioterapeutas del equipo en el estadio de fútbol de la Universidad Internacional de la Florida (F.I.U.).
Sin embargo, Honduras aseguró a los funcionarios del Tottenham que van a tener más cuidado con Palacios y no apresurar su regreso a las acciones.
Palacios, quien se negó a hablar con los medios de comunicación después del entrenamiento, se perdió el primer partido de Honduras jugado el lunes, el empate sin goles con Guatemala en Carson, California.
La situación de Palacios se suma al malestar de Honduras por las lesiones de algunos de sus jugadores, incluso tuvo que descartar a los defensores Emilio Izaguirre (distensión de la rodilla) y Maynor Figueroa antes del inicio de la Copa Oro.
Figueroa se retiró cuando su club, Wigan pidió que fuera disculpado debido a la fatiga mental y física que está pasando.
Discordia en Granada
El espíritu del equipo de Granada continúa hundiéndose tras su derrota por 4-0 frente a Jamaica el lunes.
Dos compañeros de equipo, que no pudieron ser identificados, se enfrentaron en la final de la sesión de entrenamiento del equipo el miércoles y uno de los jugadores salió furioso fuera del campo.
La cuestión surgió temprano en un partido de práctica cuando un jugador joven acusó al otro de haberlo agarrado a bofetadas deliberadamente. Según el entrenador Michael Adams, el jugador más joven perdió el control y luego lo incitó y esperó a que el otro jugador se fuera de la cancha antes que la situación explotara.
"Los últimos 20 minutos los terminamos bien, pero luego tuvimos un incidente entre dos jugadores que se increparon uno al otro y nunca he visto nada igual. Fue muy feo ," dijo el entrenador Michael Adams, quien se negó a dar el nombre de los jugadores.
El jueves, Adams dijo que iba a tratar el asunto internamente.
"La situación con los jugadores se tratará en casa", dijo en un comunicado. "Claro que el asunto se va a tratar directamente con los jugadores involucrados en el lío. No he tenido oportunidad de hacerlo hasta ahora. Voy a tener que hacer frente a esa situación un poco más tarde. Obviamente me gustaría que las cosas se calmen primero. Los jugadores comieron juntos ayer por la noche y todos estuvieron presentes. No quise decir nada todavía por lo que vamos a ver qué pasa."
Fue el segundo incidente de este tipo en menos de una semana. El sábado, un jugador que reside en Inglaterra, Delroy Facey, tuvo duras palabras contra un compañero más joven acerca de un tacle en la línea de banda.